Jueza autoriza prescribir medicamentos para morir.

Aja Riggs dijo que quería vivir, pero que también quería tener la opción de poner fin a su vida si salud empeoraba. 

Aja Riggs se sometió a rigurosos tratamientos de radiación y quimioterapia contra el cáncer avanzado de útero que sufria. La mujer de 49 años de edad y de Nuevo México recuerda la sensación de quemazón en su piel, las náuseas y la fatiga, tan fuertes que no tenía fuerzas ni para hablar.

Todo lo que ella quería tener era la oportunidad de quitarse la vida si el sufrimiento le resultaba insoportable. Los médicos Katherine Morris y Aroop Mangalik presentaron una demanda en marzo de 2012 y Riggs se les unió un par de meses después.

Ahora gracias a una decision historica tomada el Lunes por una Jueza en Nuevo Mexico esto sera posible, la jueza sostuvo que todo aquel paciente que este mentalmente competente pero fisicamente gravementes enfermos pudieran pedirle ayuda al medico para morir y este no puede negarse.

“Este tribunal no puede pensar en un derecho más fundamental, más privado o más integral a la libertad, la seguridad y la felicidad de los habitantes de Nuevo México que el derecho de un paciente mentalmente competente pero gravemente enfermo de solicitar asistencia para morir”, escribió la jueza.

La jueza tambien aclaro que los medicos que asistan a los pacientes a morir no pueden ser  encausados bajo la ley de asistencia al suicidio, que lo considera un delito grave de cuatro grado.

Otros cuatro estados, entre ellos Oregon, permiten a los pacientes solicitar ayuda profesional para poner fin a la vida si su situación se vuelve insostenible.